La marca de lencería Ann Summers, una de las más famosas del Reino Unido, había sacado una publicidad destinada a la radio, promocionando su lencería de Halloween. Prendas sensuales y terroríficas que el anuncio radiofónico emulaba con gemidos, gritos y actuaciones claramente sexuales. Puedes oírlo aquí.
La Autoridad Reguladora de las Emisiones del Reino Unido ha decidido retirarlo de las emisiones por considerarlo potencialmente ofensivo para los oyentes. El anuncio, dice el escrito del organismo, contiene material abiertamente sexual en terminología y efectos de sonido.
El anuncio en sí, comienza con varios gritos de éxtasis, a los que siguen jadeos, respiraciones agitadas, más gritos y un desenlace final. La voz en off habla de apretado, calor, potente.... y un descuento de cinco libras en las compras de Summers durante estos días de Halloween.
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